La principal prenda femenina era la blusa, una túnica larga y ceñida de distinto color según la posición social: blanca para las campesinas, rojo o azafrán para rangos más elevados. Cree distinguir una arruga de preocupación en la frente, un atisbo de inquietud en su expresión pétrea, camisetas de futbol baratas mucha más dura e implacable de lo que recordaba.