Tras descartar los de Atlético Metropolitano y Atlético Manzanares, se decide nombrarlo como Atlético Madrileño Club de Fútbol, tomando la presidencia del club Jerónimo Rodríguez Carreño y vistiendo camisa rojiblanca con pantalón azul, mientras que su feudo pasa a ser el Estadio del Manzanares. Viendo el potencial de medios de que este club dispone, Ángel Lehoz, Luis Mesa, Ventura Miguel y Gregorio Lázaro conciertan una reunión con los athléticos Manuel Gallego Suárez-Somontes y Juan Touzón, y el Imperio F.C.
